Nuestra León Claudia Marcela Avatáneo de Fernández ha partido a la Casa del Padre.
Desde el corazón
bendecimos a la vida que nos regaló disfrutar de su amistad y desde el corazón,
abrazamos a nuestro León Javier y a sus hijos.
Claudia ofreció su alegría, su inquebrantable fe, su
generosidad y su solidaridad, poniéndole fuerza y valor a cada
día.
Nos deja el testimonio de la amistad
sincera.
Nos deja una
presencia entrañable para nuestro
espíritu.
““Ya
viene el esposo, salgan a su encuentro””
San
Mateo 25, 1-13
Claudia
querida: la más bella doncella, la más hermosa esposa: allí estabas encabezando
el cortejo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario